24 de noviembre de 2010

Libre albedrío

Y en el principio…. Sólo estábamos nosotros.

Niños. Puros, inocentes, curiosos, alegres. Todo era nuevo. Todo distinto. Todo por nombrar, por entender, por compartir. Nada que temer, nada por lo que preocuparse.

Y entonces llegó la corrupción. En realidad siempre estuvo allí, es sólo que éramos demasiado jóvenes para que nos afectara.

Y se nos olvidaron las primeras veces. Las primeras cosquillas. Las primeras sonrisas. El primer guiño cómplice, el primer abrazo, el primer beso.

Y la amistad se transformó en conveniencia. Y la familia empezó a parecer imperfecta. Y las relaciones tuvieron fecha de caducidad.

Y se nos agotó la capacidad de sorpresa. Y el amor empezó a doler.

Estamos corrompidos, somos seres bajos e instintivos. No hay raciocinio ni cordura en las pasiones.

Adán y Eva fueron expulsados por gracia de su hedonismo. Abel murió, Caín sobrevivió con su marca. ¿De quién crees que descendemos?

Con estos antepasados, con esos antecedentes, ¿qué se supone que se espera de nosotros? ¿Enmendar errores pasados o perpetuar las costumbres heredadas? ¿Creer que somos mejores porque repetimos la historia, una tradición malediciente a nuestras espaldas? Somos iguales que ellos, la corrupción es intrínseca a nuestra naturaleza. Es nuestra motivación, como que a los demás les vaya peor, como regodearnos en la desgracia ajena.

Por mucho que lo intentemos, por mucho que se nos adoctrine en el camino hacia la virtud, ni siquiera nuestros maestros quisieron aplicar sus propias enseñanzas. Tan corruptos como sus propios ancestros. ¿Y nosotros nos atrevemos a opinar sobre lo bueno y lo malo, sobre lo que es correcto y lo que no?


Nada nos lo impide, podemos elegir. Jodido libre albedrío. Podemos dejarnos llevar, continuar nuestro instinto. Lo tenemos muy fácil.

O podemos seguir el camino de la virtud, una senda sin ángeles guardianes, sin espadas flameantes guiándonos. Estaremos solos, por donde pocos han pasado antes, sin baldosas doradas que nos guíen, iluminando la oscuridad con nuestro pobre fuego.

Es nuestra maldición. Nuestra propia libertad.

Libre albedrío, colega”, me dijo una vez un ángel burlándose de mí. “Tú eliges, eres el dueño y señor de la creación, el universo no hará nada por impedirlo.

Pues elijo. Elijo ser humano. Mitad dios, mitad hombre.

Elijo equivocarme, elijo aprender de mis errores. Elijo ser imperfecto.

Lo cual me convierte básicamente en humano.

No sé lo que puedo hacer, no tengo respuestas para tu pregunta.

Pero sí sé cómo conseguirlo, es sólo pura voluntad.

Libre albedrío, colega. Dios no tiene nada que ver en todo esto. Te jodes.

Jodido ángel cabrón. Lo tiene fácil, se limita a obedecer órdenes. Como todos aquellos que pueblan el infierno. No imagino un castigo peor que no poder ejercer de tu propia libertad.

Imagino que el camino hacia las calderas está asfaltado con todas las oportunidades que dejamos pasar, por todas las veces que nos dejamos llevar, que decidieron por nosotros, que hicimos lo que se esperaba de nosotros y realmente no queríamos.

El infierno debe ser un lugar concurrido. Y nada divertido. Igual que el cielo.

Prefiero quedarme en medio. Aún tengo mucho por hacer. Y lo que dure, duró.

No es Tyler quien habla, soy yo.

Cómo me deprime Madrid.

12 de noviembre de 2010

El culto de Baltar


Battlestar Galactica es una serie que al principio me costó bastante seguir. Lo que ahora se llama una serie "de personajes" ambientada en el espacio tras una hecatombe que destruye a la práctica totalidad de la raza humana, en la que los supervivientes buscan un planeta llamado Tierra donde está su hogar.

Tras dos primeras temporadas en las que me costó seguirle el rollo, por fin llegué a la tercera donde todo cambia, o, al menos, empecé a entender la serie. Las imágenes de cámara al hombro en el espacio, los primerísimos planos a los protagonistas, las muertes sucesivas de principales y secundarios, el espíritu altamente militarizado (dictatorial diría) de una generación contra la obediencia insumisa de otra, la eterna lucha, los buenos que hacen maldades con la ley en la mano, los malos que actúan por bondad hacia Dios...

La música es un punto y aparte en esta serie: original, completa y armónica con el espíritu de la serie, quizá en conjunto tiene piezas repetitivas (el TI-TI-TI-TI del principio de cada capítulo es insufrible) pero también grandes aciertos. La versión de "All along the watchtower" es absolutamente magistral, acojonante diría yo, a la altura de el cambio de tono radical que efectuó Jimi Hendrix con la original de Bob Dylan hace cuarenta años.

El inquietante Romo Lampkin (Mark Sheppard) me fascinó desde su primera aparición al final de la tercera temporada: un abogado luciendo unas gafas de sol innecesarias (sólo por chulería), cuidando un gato al que odia, pidiendo defender al responsable de la extinción de la humanidad sólo por aburrimiento. Lamentablemente es un personaje que quedó por desarrollar en el resto de la serie, aún con un capítulo en la cuarta casi dedicado a él, a su cinismo, a su aplastante capacidad de convicción, e incluso capaz de transformarse de abogado de vuelta de todo a hombre de acción con principios. Lo disfruté como un enano, y de verdad que lo sentí por su gato.

Pero de entre todos los personajes me quedo sin duda con Gaius Baltar, el genio científico ególatra, vicioso, apático, ataráxico y terriblemente arribista, que con su exagerado acento británico y dejándose llevar por el plan de Dios, sin control sobre lo que Él tiene reservado, engatusa a las masas y seduce a las mujeres casi sin pensarlo, sin dejar de ser nunca un patético hombrecillo con aires de grandeza. Tras hacer de amigo gay de Bridget Jones, James Callis está en el papel de su vida en sucesivas bajadas a los infiernos de los odiados y ascensos al cielo de los elegidos, con significativos cambios físicos a lo largo de las cuatro temporadas de la serie.

Os dejo la música de "El culto a Baltar", cachondísima escena de la cuarta temporada (que no pongo por no destripar un punto crucial de la serie), y una muestra de lo que la música en una serie "del espacio" atípica puede dar de sí. Dale al play y sigue navegando en otra página. Sólo déjate llevar.



6 de noviembre de 2010

De fractales y hombres

Hace casi 11 años, andaba asqueado en la universidad, buscando soluciones al impass en el que me encontraba. Sabía lo que quería pero no sabía cómo llegar. Mientras tanto, me agarraba a lo que podía. Por ejemplo, a una incipiente revista on line, editada en ese invento que estaba revolucionando la sociedad y del que apenas nadie entendía nada: Internet.

Hacerme amigo del catedrático que la dirigía, antiguo profesor mío, que elogiaba y corregía los cuentos que le enviaba, tampoco solucionaba nada, pero me hacía sentir mucho mejor. Es algo que nunca supe agradecerle lo suficiente y que sólo la perspectiva de los años ha hecho que me diera cuenta. Creo que fue gracias a él por lo que empecé a darme cuenta de la endogamia universitaria y el consecuente asco que le cogí al poder monolítico establecido.

Aunque aunar vocación con obligación era bastante complicado, y me guiaba más por el impulso de escribir que por el oficio. No creo que fuera lo suficientemente disciplinado para volcarme en la ficción, pero tenía menos tiempo aún para la no ficción. Por eso, de no sé cuántos cuentos publicados, sólo publiqué dos artículos, lo cual dice bastante poco de mi supuesta vocación.

Que muere gente todos los días es algo que todos sabemos y estamos acostumbrados. A veces, muere alguien a quien nunca hemos conocido, pero del que admiramos su obra. Normalmente suele pasar con actores, escritores, e incluso políticos. El 14 de octubre ha fallecido uno de las personas que me parecen más admirables del siglo XX, aunque no creo que pase a la Historia en el lugar que se merece.


Benoit Mandelbrot fue un matemático de origen polaco, nacionalizado francés, que exploró los confines de la geometría matemática en Estados Unidos. Fue el inventor de la matemática fractal en los años 70, continuando los estudios aislados de otros colegas del siglo XX. Lo que en su momento supuso un capricho matemático, en la actualidad es un argumento imprescindible en cualquier estudio puntero con aplicaciones prácticas, desde la termodinámica hasta la economía, pasando por la arquitectura o la medicina.

El primer artículo que publiqué en mi vida fue sobre fractales, y entonces descubrí lo importante de los estudios de Mandelbrot. Me fascinaron las curvas del conjunto que lleva su nombre, la similitud con el símbolo milenario de Buda, del infinito, su capacidad de auto-réplica, la inimaginable belleza de las gráficas al aplicar color a las iteraciones, la similitud con la serie de Fibonacci, con la proporción áurea, con el número phi. De repente, todo estaba relacionado, todo podía tener sentido. Un mundo nuevo no académico se abría ante mí y me mostraba todo su esplendor.


Supongo que sería este suceso, unido a otros muchos más (muchísimos más), los que me llevarían a tomar la decisión hace diez años de atar todos los cabos sueltos que pudiera y cambiar de vida, a dejar atrás lo que sabía que no quería y tomar decisiones, acertadas o no pero mías, sin miedo a las consecuencias.

PD: aunque sea tarde, gracias Julio

1 de noviembre de 2010

Expresiones gráficas consuetudinarias que acontecen en la rúe (II)

Hablemos de la España actual, nuestro sitio y nuestra espina, conjunto de nacionalidades constitucionales que lleva a ostias desde hace miles de años y ahora se ha convertido en el parque temático de guiris que vienen a pasar su jubilación, o a ver el partido de fúmbol de turno, mientras se dejan los leuros en instalaciones y hoteles de dudosa procedencia y aún más dudoso destino.

Pero es que en España tampoco se hace nada por evitarlo. O si no podemos ver que en la botadura del barco, galeón réplica de los que en el siglo XVII surcaron los mares de medio mundo acojonando a piratas y flotas oficiales con aspiraciones imperialistas, en la que los medios de toda España y parte del extranjero asistieron boquiabiertos al posicionamiento de la botella inaugural del apadrinamiento del galeón que nos ha representado en la Expo de Shangai 2010.

- Klaus, ¿eso es un Chanoine?
- Wolfgham, desde luego eso no es un Montaudon. Será un cava local. España está al lado de los gabachos
- Lo estoy buscando en mi iPod, y Cruzcampo sólo aparece como cerveza
- ...
- Qué frío hace aquí, ¿no? ¿En Andalucía no están todo el día cantando y bailando en la playa?
- Estoy deseando volver a Mallorca

Pero es que, en nuestro afán por complacer al guiri de turno, no es descabellado abusar de los tópicos: pubs irlandeses pueblan nuestras esquinas urbanas y centros comerciales, como antes lo hicieron los almacenes de oferta en su previa reconversión a Starbucks u oficinas inmobiliarias ahora abandonadas.

- Manué, que digo yo que quiero darle un aire distinto y original a la bodegiya
- Poesoeh sencillo, kakí en Illacrittina sabemos mucho deso
- Mira porellintenné ese a ver si encuentras algo
- ¡Mira mira! ¡En el gugle ese lo pone bien claro! Ettá vitto que a los guiris lo que les gutta son las "taverns"
- Poyatá, le ponemos TAVERNA en vez de bodeguilla y el éssito ettá asegurao


Aunque nuestra complacencia no se limita al visitante guiri, sino que, considerando el estado alterado de lo que viene siendo la nacionalidad española, considerar al visitante del norte como tal, por mucho que Miguel Ángel Revilla se empeñe en pensar en España cuando necesita una erección, es también moneda de cambio.

- A ver Mari, yo creo que limitarnos a tener el local en la Plaza Mayor de Madrid no es suficiente
- Pero Pepe, si los que vienen a ver los belenes se comen el bocata calamares y se van
- Necesitamos algo más, algo con aire español, que el cocidito madrileño tiene digestión difícil
- Pues ya está, ofrecemos pegkaíto con un 50 por ciento de auténtico rebozado andaluz y nos ahorramos cambiar el aceite de la freidora
- ¡Ole, ole! Ya puedo escuchar las conversaciones en galego y catalá llenando la tasquilla
- ¿Y los vascos?
- Esos van de pintxos al Lizarrán

Pero la cruda realidad es que la "crisis" nos atenaza a todos, y no sólo los bares tienen que adaptarse.

- ¿Cuánto dice que tengo que ingresar?
- Lo siento señora, Hacienda somos todos
- ¿Hacienda? Pero si estoy hablando del recibo del agua
- ¡Ejem! Si bueno, pero es que con tanto mando intermedio y presidente de comisiones, el Estado necesita cada vez más recursos
- ¿Me va a decir que mi dinero va a pagar el coche blindado del presidente de la comisión por el agua residual del condado?
- Concretamente sus dietas de la semana que viene
- No me haga esto...
- No se preocupe señora, los bancos también nos adaptamos a la crisis. En vez de caramelos, ahora ofrecenos pañuelos, que salen más baratos y enjugan mejor las lágrimas de los contribuyentes. Y lo que se va a ahorrar en dentista...

Se acabaron el cachondeo y las comilonas sin sentido. ¡Fuera caprichos imperialistas y superficiales! ¿Pero qué es eso de ir al Corte Inglés y pedir correas de cuero para el Viceroy! ¡BELCRO señora, que es más barato!

Y es que si no, las instituciones pueden tomar medidas en el asunto y, para protegernos de nosotros mismos, utilizar los recursos a su alcance para construir estaciones de autobuses como la de Puertollano (la ciudad de las dos mentiras) y ensamblar en ellos símbolos paganos de protección, que recuerdan remotamente a aquelarres, invocaciones demoníacas o simplemente, días de la bestia cañís. Cosa que es cierta, pero recordemos que en las pelis de serie B en las que los avezados satanistas convocan al diablo para tomar el té están dentro del pentáculo, precisamente para protegerse de su influencia.

Aunque, aún así, puede no ser suficiente, y necesitemos un símbolo, una señal, para hacer notar que estamos saturados, hartos o quemados lo suficiente como para necesitar ayuda, y que los de alrededor lo sepan. ¿Y qué mejor y más barato que la clásica y mundialmente conocida berrea de hartura que se recomienda a la entrada de una playa de Huelva?

Y es que las hordas de personas insatisfechas, hijas de la generación ESO, LOGSE o tomateras, pueden rebelarse y llegar a extremos peligrosos en los que España como concepto correría peligro, y ejércitos de HOYGANS tomarían el poder y expulsarían a los miembros de la RAE, esos arrogantes, para demostrar al mundo que la revolución, la anarquía, es la respuesta.


¡VIBA!

27 de octubre de 2010

Odio

Las cien cosas que más odio en este mundo son:

  • 1 - Los iluminados
  • 2 - Los que me dicen lo que tengo que hacer
  • 3 - Los que te perdonan la vida cuando te hablan
  • 4 - Los manipuladores de todo a cien
  • 5- Que me hablen con condescendencia
  • 6 - Los medios de transporte que no llegan a la hora y se la suda
  • 7 - Los autobuses que salen antes de la hora
  • 8 - Los silencios incómodos (que no el silencio)
  • 9 - Que me digan que me van a llamar  cuando sé que nunca lo van a hacer
  • 10 - Que me corten por teléfono de forma desagradable (con lo fácil que es decir "ahora no puedo hablar" o "bueno, ya hablamos")
  • 11 - Que me digan insistentemente "no te va a dar tiempo"
  • 12 - Que siempre que tengo prisa el ascensor tarde 5 minutos en estar disponible
  • 13 - Que no me miren cuando me hablan
  • 14 - Que me tomen por tonto
  • 15 - El tomate pocho que siempre te entra en el kilo
  • 16 - Los abrefácil con los que tengo que usar tijeras
  • 17 - Que en la cuenta siempre cobren de más
  • 18 - Que la vuelta siempre esté mal a favor de la tienda o bar
  • 19 - Que me pongan el último hielo con el hueco para arriba
  • 20 - Que me miren con altivez

  • 21 - Hablar educadamente y que me respondan de forma grosera
  • 22 - Los que siempre le ven el lado malo a todo lo que pasa
  • 23 - Que nadie se ría cuando cuento un chiste genial
  • 24 - Que no me hablen claro
  • 25 - Que me den plantón
  • 26 - Los gorrillas
  • 27 - Los niños gritones
  • 28 - Los padres que maleducan a sus hijos
  • 29 - Las mujeres que pierden la cabeza por descerebrados
  • 30 - El servicio de atención al cliente de Pepephone
  • 31 - Suspender más de medio teleco con 4,6 - 4,8
  • 32 - Los servicios de atención al cliente con contestador
  • 33 - Las rebajas del 5%
  • 34 - Que me miren a la oreja cuando me hablan
  • 35 - Los dependientes de la FNAC (menos los de libros)
  • 36 - Las nulas explicaciones de los médicos
  • 37 - Las nulas explicaciones de los gestores
  • 38 - La impresentabilidad de los abogados
  • 39 - El carácter explosivo de las enfermeras (en su vida privada, claro)

  • 40 - Los coches aparcados ocupando dos plazas
  • 41 - Los que cuidan más a su coche que a su novia
  • 42 - Los machistas
  • 43 - Las mujeres que dejan que un cabrón le arruine la vida
  • 44 - Las divinas perdonavidas
  • 45 - El garrafón
  • 46 - Llegar el primero a la barra y que me atiendan el último
  • 47 - Que los aperitivos de las bodas sean lo mejor del menú
  • 48 - Que los camareros con las bandejas de los aperitivos nunca pasen por mi lado
  • 49 - Las feministas
  • 50 - Mis putos ricitos
  • 51 - Mis pelos de la espalda (viva la fotodepilación)
  • 52 - Las cadenas en las que si no reenvío el mensaje estaré maldito yo y mis descendientes hasta la cuarta generación
  • 53 - Que no me guste Blade runner
  • 54 - El final de Matrix Revolutions y de El retorno del jedi
  • 55 - El precio del tomo completo edición especial de Watchmen
  • 56 - El reaggeton (a muerte)
  • 57 - Los fachas
  • 58 - Los que sólo leen el Marca
  • 59 - Que se sobrevalore a Bardém y a Pe
  • 60 - Que Francisco Ibáñez esté tan mayor
  • 61 - Volver a ver una peli que me emocionó y me defraude
  • 62 - Los ultras del fúmbol
  • 63 - Los enchufados laborales que presumen de ello
  • 64 - Que haga tres años que Búnbury no saca un disco brillante
  • 65 - El precio de los tóners
  • 66 – Los sabelotodos que te hablan como si fueras un ignorante
  • 67 - La burocracia universitaria
  • 68 - Las amigas murciélago (o bat factor)
  • 69 - Tener que gastar 2€ para comer una palmera de chocolate decente


  • 70 – La comprensión generalizada a la mierda de final de LOST
  • 71 - Que Isabella Rosselini esté hecha una vieja pelleja
  • 72 - El precio de la comida ecológica
  • 73 - Que no me abrochen los pantalones
  • 74 - Los errores de grabación cuando el DVD-R está al 99%
  • 75 - Los que tienen miles de amigos en todas las redes sociales
  • 76 - Las personas que presumen de sus conquistas cuando su pareja no está
  • 77 - Los que no paran de comer y nunca engordan
  • 78 - Que me pongan a parir a mis espaldas y luego me pongan buena cara
  • 79 - Pedir favores
  • 80 - Que no me perdonen haber hecho favores
  • 81 - Las llamadas antes de las 10 de la mañana
  • 82 - Las llamadas cuando estoy comiendo
  • 83 - Que me digan que han dicho algo de mí y no me digan quién
  • 84 - Las pelis en screener
  • 85 - Cuando a la informática no le da la gana funcionar
  • 86 - Fregar platos
  • 87 - Las groserías a destiempo
  • 88 - La gente que hace lo contrario de lo que dice
  • 89 - Que me interrumpan al hablar
  • 90 - Que me digan que saben cómo soy
  • 91 - Los que niegan que les gusta el sexo (normalmente mujeres)
  • 92 - Las mujeres que sólo tienen amigOs
  • 93 - Que me obliguen a pedir disculpas por ser como soy
  • 94 - Que me guste tanto dormir
  • 95 - Caerle mal a la práctica totalidad de las novias o esposas de mis amigos y confiar en que ellos sabrán separar
  • 96 - Los que hacen el idiota cuando van con mujeres
  • 97 - Las mujeres que les agrada que los hombres hagan el idiota por ellas
  • 98 - Madrugar
  • 99 - La maledicencia

Y 100 - Los que empiezan una entrada de su blog diciendo "Hace mucho que no escribo...."


PD: Ofú, qué a gusto se queda uno....

22 de octubre de 2010

Buenas noches

Vigalondo, cómo no



PD: Ahora que le conozco un poco, puedo decir que es bastante más majete de cara al público que en privado. Ahí lo dejo

16 de octubre de 2010

Las manos del diablo

Que el diablo me lleve si alguna vez hubiera podido preverlo.

El problema no es la previsibilidad, sino la imposibilidad de evitarlo. Cuando varias líneas temporales confluyen en una sola, cuando el pasado, tus propios 'yo', actúan sin pensar en las consecuencias, es alucinante cómo el universo entero se sincroniza para que haya consecuencias, y éstas se junten en una solo, irremediable, imprevisible, inamovible.

Uno vive y actúa, sin darse cuenta de los efectos que pueden tener en los demás estas interacciones. Incluso si no han tenido importancia para nadie, la tienen para uno mismo. Supongo que será otra forma más de definirlo: "el tiempo pone todo en su sitio". Por las barbas de Abraham que es así.

Joder

14 de octubre de 2010

Ayúdate a ayudarte

Siempre he pensado que los libros de autoayuda son una soberana estupidez, que basan su negocio en personas que pasan un mal momento o simplemente están jodidas. Es decir, casi todo el mundo.

Estos libros están rellenos de lugares comunes, frases hechas y conclusiones de Perogrullo. Estamos de acuerdo en que a veces necesitamos que nos recuerden cuál es nuestro lugar en el mundo, qué nos falta o qué nos sobra, e incluso alguna dosis soluble de autoestima, que desaparece en cuanto ponemos un pie en la calle y nos volvemos a enfrentar a la realidad.



Recuerdo que Bridget Jones en su diario no paraba de comprar este tipo de libros cada vez que se encontraba sola o despreciada, que era la mayor parte del mismo. En cuanto se sentía feliz con alguna pareja tiraba el vodka, los cigarillos (salvo los postcoitales) y los libros de autoayuda, que sólo le servían para fagocitarse en su propia ruina de vida.

Algo parecido debió pasarle a la autora Choi Yoon-Hee, escritora surcoreana conocida por sus libros versados en la felicidad y la esperanza en el país con más tasas de suicidios de mujeres del mundo. Ni veinte libros hablando sobre lo bonito de la vida y lo maravilloso de ser feliz pudieron evitar que ella y su marido se suicidaran ahorcados en la habitación de un motel.

Lo cual me lleva a la interesante reflexión de que uno no puede pedir ayuda si no quiere ser ayudado.  “Autoayuda” es un lítote, en realidad pides ayuda comprando el libro y siguiendo las directrices del gurú de turno.

Por eso me gusta más el método socrático de “conocerse a uno mismo para encontrar la verdad”. Hay que reconocer tus propias limitaciones y carencias para empezar a ver las cosas con objetividad, algo que por muy jodido que estés no se puede perder nunca. Nadie nos conoce mejor que nosotros mismos y somos nosotros los que tenemos que poner las medidas para encontrarnos mejor, así que creo que la búsqueda de la felicidad es la búsqueda del conocimiento de uno mismo.

Por eso, que me digan lo que tengo que hacer para ser feliz no me cuadra mucho en el esquema de lo que es una “ayuda”. A lo mejor para mí la felicidad es tener alternativas, para ti es una casa y una pareja, para él un viaje alrededor del mundo, para Mauro comer naranjas en la ducha y una playa llena de bikinis, o para Conan aplastar enemigos, verles destrozados y oír el lamento de sus mujeres. Por eso creo que no hay una pauta única para conseguir la felicidad. Incluso hay quien es feliz no siéndolo.



Creo que el mundo, las relaciones, el trabajo, incluso la familia o la amistad: todo es un escenario de juego en el que intervienes con las cartas marcadas. Así que, ¿por qué no jugar al juego de la forma que más te guste? De esta forma puede que hasta de diviertas en el proceso, que es donde para mí reside la verdadera felicidad. No concibo una vida donde haya alcanzado todas mis metas, me moriría de aburrimiento.


Lo que está claro es que este año, este mes, este día, este minuto, este mismo instante, jamás de los jamases volverá, así que disfrútalo como te apetezca... O, si eso te hace feliz, como te digan los demás.

PD: hace unos días tuve una leve discusión con la novia de un amigo en la que afirmaba que en El Secreto estaba la verdad revelada. La parte de generar buen rollo y agradecimiento está bien, pero no han inventado nada.

1 de octubre de 2010

Expresiones gráficas consuetudinarias que acontecen en la rúe (I)

Durante años, y sobre todo, desde que existen los móviles con cámara, he recopilado una serie de fotos de carteles que me han llamado la atención, bien por lo originales, bien por ser una muestra de lo que las personas son capaces de inventarse con tal de llamar la atención de los demás sobre algún tema.

Todo empezó con un cartel que me dijo mi padre que existía hace muchos años en el embalse de Manzanares el Real, similar a este:


La advertencia es clara, y la pillada sería bochornosa. Esta foto es de un pueblo al lado del de mi padre, en Segovia, y venía a decir lo mismo.

El tiempo pasa y las cosas se modernizan, las multas son más gravosas y las advertencias más sutiles, pero el significado viene a ser el mismo:


La dirección de mi antigua empresa era bastante clara al respecto del uso y disfrute del único baño disponible para los 25 trabajadores, al lado de la sala de maquillaje donde los invitados podían advertir nuestras condiciones.

Claro, que también está el completamente explícito, extremeño para más datos, que se deja de sutilezas, poesías, metáforas floridas o calambures, y va al grano:



O la reacción vecinal del Barrio del Pilar cuando el ayuntamiento propuso gentilmente el abono por estacionar en las vías públicas, con gran regocijo y espontánea aclamación popular a tal medida:



Claro que siempre están los anunciantes originales, con propuestas sinceras, que ponen límites en tres palabras a siglos de tradición académica de buenas costumbres comerciales:


En Huelva ya se sabe, el comercio no tiene por qué estar reñido con la honestidad. Al igual que en Moncloa, en el que un cartel puede llevar a equívoco si se lee de un vistazo rápido:


Y esque no poner un cartel en toda la galaxia puede ser complicado, sobre todo en términos de jurisdicción venusiana.

Menos mal que en Asturias lo tienen claro, y el Gobierno Regional de allí aclara divinamente la opinión que tiene de sus ciudadanos:


Mientras que en Granada, son los ciudadanos los que dejan su opinión sobre el ayuntamiento, al menos en materia de andamiaje:


Mientras tanto, en la Ciudad Lineal de Madrid, en la pequeña isla de Ciudad Jardín, aún quedan unos irreductibles vecinos que se enfrentan al poderoso imperio municipal:





Y es que con tanta queja, al final los medios se nos quedan grandes y hay que recurrir a lo que se tenga más a mano, por ejemplo el spray:


O bien, dejarnos de mensajes derrotistas y regresar a Granada para ver que aún puede quedar un soplo de esperanza:


Nota idiota: el "noespatanto" me mató...

Son esos rayitos de esperanza los que nos hacen tomar conciencia de que al final todos somos personas, humanos o lo que sea, y todos tenemos derecho a reclamar lo que es nuestro, incluso cuando pasamos por Rivas Vaciamadrid:


E incluso ir más allá, concretamente a Salamanca, para recoger los pedazos de lo que quede de nosotros y recomponernos en mejores personas, e incluso en personas enamoradas:



Vaya este homenaje desde este rinconcito de internet a la gente con iniciativa, creatividad, que no se deja pisotear y que, por supuesto, tiene algo que decirle al mundo.